En tiempos pasados, nuestros abuelos, padres y ahora hijos siguen manteniendo las tradiciones.
Aunque la situación actual de alarma sanitaria COVID-19 y confinamiento no lo permite completamente. Podemos seguir transmitiendo estos conocimientos y habilidades que los mayores nos dieron.
Todos en Samaniego de una forma u otra seguimos disfrutando de estas fechas que aunque no podamos en su plenitud, no queremos perderlas, cocinar rosquillas al horno, El huerto, El juicio a Judas
Judas fue fabricado por los chavales del pueblo.
Se trata de un gran muñeco de paja, vestido con ropas viejas, que porta 13 monedas en su bolsillo, se le atará en lo alto de un tronco de ocho metros de altura, que se coloca en la plaza de la villa.
Junto al Judas, se coloca el paso procesional de El Huerto, con su imagen de la Resurrección. A lo largo de la mañana, el paso se irá cubriendo con lazadas de rosquillas elaboradas en cada una de las casas del pueblo.
El Judas acaba condenado como responsable de todo lo malo que ha ocurrido en el pueblo, aunque el juicio cuente con todas las garantías que ofrecen el secretario, el fiscal, el defensor y el juez.
Hasta hace unos años, tras la lectura del veredicto, una persona salía de entre el público y le pegaba media docena de tiros al muñeco. Aquel uso se ha abandonado ahora por razones de seguridad. Sólo se baja el muñeco y los niños del pueblo lo vapulean y arrastran por las calles hasta la iglesia, allí le dan fuego.